jueves, 31 de enero de 2019

Aparato Digestivo.


El intestino se divide en tres porciones: anterior, medio y posterior. 

Intestino Anterior.
Se extiende desde la membrana bucofaringea hasta la segunda porción del duodeno (ampolla de Vater).

Esófago.

Su pared nace del esbozo traqueopulmonar, aproximadamente a la cuarta semana. El endodermo lo reviste hasta ocluir la luz. Al final del período embrionario, la luz se abre y se diferencia el endodermo en epitelio plano estratificado. La muscular del 1/3 superior es estirada y deriva de los cuarto y quinto arcos faríngeos; los 2/3 distales son lisos y deriva del mesodermo esplácnico.

Estómago.

Crece como una dilatación cuyo borde dorsal crece más rápido que el ventral. Luego gira 90º, quedando el borde dorsal hacia afuera y el ventral hacia adentro.
Está unido al mesenterio dorsal a la pared posterior del abdomen. Cuando rota hacia la derecha, arrastra el mesenterio hacia la izquierda, formando la trascavidad de los epiplones. En su pared anterior presenta el mesenterio anterior, que al formarse el hígado, constituye el ligamento gastrohepático.

Duodeno.
Se desarrolla a partir de la porción caudal del intestino anterior y la porción cefálica del intestino medio. A este nivel desemboca el colédoco. La luz del duodeno se cierra por proliferación del endodermo para formar el epitelio, que después se abre. El mesenterio anterior y posterior forman el ligamento de Treiz. 


Hígado y biliares. 
Aparece en la tercera semana como un brote endodérmico en la parte más caudal del intestino anterior en el mesenterio ventral. Se divide en dos porciones: una cefálica grande que dará origen al parénquima, a las vías biliares intrahepáticas y los conductos hepáticos. La porción caudal que es más pequeña, dará origen a la vesícula biliar y al conducto cístico. El mesenterio ventral dará origen al epiplón gastrohepático, al peritoneo visceral del hígado y al ligamento falciforme o suspensorio del hígado.


Páncreas. 
Se desarrolla a partir de la quinta semana, en la parte caudal del intestino anterior, a partir de brotes endodérmicos dorsal y ventral. El borde ventral forma el proceso unciforme y la cabeza pancreática. Gira hacia atrás y se fusiona con el brote dorsal que formará la parte restante de la glándula. Los cordones se diferencian en acinos.


Intestino Medio.
Se extiende desde el colédoco hasta el 1/3 proximal del colon. Su crecimiento es longitudinal y lo hace fuera de la cavidad abdominal entre la sexta y la novena semana.
El intestino medio se ubica en el plano sagital y su vértice se encuentra en el conducto onfalomensentérico o vitelino. El intestino medio gira 90º formando el asa vitelina. En el segmento postvitelino aparece la dilatación del ciego.

A medida que se cierra la hernia fisiológica, el intestino vuelve a la cavidad abdominal. Se produce un giro de 180º y el ciego queda a la derecha. El segmento previtelino forma las asas intestinales y el postvitelino constituye la parte terminal del íleon y una parte del colon. El colon es un vestigio del desarrollo del ciego.

Intestino Posterior.
Se extiende desde el 1/3 distal del colon transverso hasta la membrana cloacal.
En la sexta semana, la porción caudal está comunicada con la alantoides por su pared ventral y por los conductos de Wolff a los lados. La cloaca se dilata en sentido cefalocaudal por la formación del tabique urorrectal, que crece en sentido caudal produciendo pliegues en la membrana cloacal, que termina dividiéndose en recto y conducto anal superior hacia el dorso; y en el seno urogenital ventralmente.

La membrana cloacal está formada por el endodermo cloacal y el ectodermo superficial.
La membrana anal desaparece al final de la séptima semana.



No hay comentarios:

Publicar un comentario